jueves, 16 de mayo de 2013

Un juez ordena prisión para el ex presidente de Caja Madrid Miguel Blesa

MADRID.- El titular del juzgado de instrucción nº 9 de Madrid ha ordenado el ingreso en prisión comunicada eludible bajo fianza del ex presidente de Caja Madrid Miguel Blesa, dijo el jueves el juzgado en una nota de prensa.

"El titular del juzgado de instrucción nº 9 de Madrid ha ordenado hoy el ingreso en prisión comunicada, eludible bajo fianza de 2.500.000 euros, de Miguel Blesa, por la compra del City National Bank de Florida", dijo el gabinete de prensa del Tribunal Superior de Justicia de Madrid.
Según la nota, la acusación de Manos Limpias solicitó el ingreso en prisión bajo fianza de tres millones de euros, a lo que la fiscalía mostró su oposición.
Caja Madrid, una de las siete cajas de ahorros que se unieron para formar Bankia, pagó 927 millones de dólares cuando compró un 83 por ciento de CNB en 2008. Compró la participación restante posteriormente, sin desvelar el precio.
El ex banquero está siendo investigado por irregularidades en la adquisición del citado banco, así como por un crédito concedido al grupo Marsans, propiedad del ex presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán.
La condena se produce a raíz de una demanda presentada por la asociación Manos Limpias, que pidió la imputación de Blesa y otros ex altos cargos de la caja de ahorros.

Vargas Llosa dice que "no hay que dejar la política en manos de los pícaros"

SOFÍA.- La crisis económica ha traído un peligroso desencanto social con la política y las instituciones, algo que amenaza a la democracia y ante lo que el escritor Mario Vargas Llosa planteó la necesidad de más participación, para evitar que el poder quede en malas manos.

"La democracia es participación y, si no hay participación, se va asfixiando y desmoronando. Hay que defender la idea de que, si queremos que la política sea decente, hay que llevar a la gente decente a hacer política y no dejar que esté en manos de los pícaros", declaró una charla con periodistas en Sofía.
"Creo que esa falta de participación y esa aptitud cínica frente a la política puede destruir las democracias desde dentro. Creo que esa es hoy día la amenaza mayor que tienen las democracias europeas, incluso las de América Latina", comentó el Nobel de Literatura.
El autor de "La ciudad y los perros" recibió el título de doctor honoris causa por la Universidad de Sofía, la más antigua y prestigiosa de Bulgaria.
Según el novelista, hay mucho desdén y mucho desprecio hacia la política en general, y esa actividad se percibe como algo sucio y corrupto, de lo que hay que apartarse.
En este contexto, el escritor hispano-peruano se refirió al papel de los intelectuales en la política y la desconfianza de la gente hacia ellos, porque "los intelectuales se han equivocado tantas veces".
"Los intelectuales tienen la obligación de participar en la vida cívica y pueden aportar, en una sociedad democrática, que el lenguaje político sea creíble, que sea creativo y no de clichés. Hacer que el lenguaje político sea auténtico y que sirva para difundir verdades y no mentiras", aconsejó.
Otro de las aportaciones puede ser, a su juicio, que la política no sea solamente gestión de lo existente, sino también creación, propuestas creativas y realistas, lo que requiere de su imaginación y fantasía.
Además, los intelectuales deberían estar en la vanguardia de la defensa de la libertad, un elemento fundamental para que haya una vida intelectual realmente creativa.
"La literatura sin libertad se asfixia. Entonces, la defensa de ciertos valores, como la libertad, debería tener a los intelectuales en primera fila", reflexionó.
Y añadió que, en momentos de crisis, hace faltan ideas, perspectiva, racionalidad, campos en los que los intelectuales pueden aportar algo.
Preguntado sobre la génesis de la crisis, el creador de "Pantaleón y las visitadoras" opinó que se han combinado la irresponsabilidad de unas actitudes muy poco realistas y una visión fantasiosa que llevó a muchos países a vivir por encima de sus medios y a endeudarse.
"Ha habido, por parte de los bancos, una actitud sumamente insensata guiada por el afán de lucro inmediato, que ha hecho sacrificar el futuro en nombre de un presente que era muy frágil", destacó Vargas Llosa.
El escritor pidió aprovechar la crisis para hacer una autocrítica muy profunda de la irresponsabilidad con la que se han manejado las finanzas públicas y privadas en los últimos años, "de tal manera que no se vuelva repetir una desgracia parecida".
Vargas Llosa describió la idea en su ensayo "La civilización del espectáculo": la cultura no puede ser solamente un espectáculo y una distracción, una tendencia muy peligrosa, porque, indicó, además de divertir, debe exigir un esfuerzo intelectual y no puede ser lo mismo que un circo o un musical.
"Porque, si es eso, la cultura va a dejar de tener ciertas virtudes que creo que son la gran contribución al progreso humano, al mantener unas ciertas tablas de valores entre lo que es o no es importante, lo que es bueno y es malo, lo que es feo y lo que es bello", destacó.
Y advirtió que, si esas distinciones se pierden, la cultura va desapareciendo, aunque hayas cosas que parecen cultura, lo que traerá un gran empobrecimiento social, político y moral.
Por eso, según el escritor, hay que devolver a la cultura la seriedad y la responsabilidad y sacarla de esta función de puro entretenimiento.